jueves, 25 de octubre de 2012

Por qué los mercados –y la eurozona- sólo pueden sobrevivir con reglas



Queridos lectores,

La tormenta financiera –por qué los mercados sólo pueden sobrevivir con reglas- es un libro del especulador y filántropo húngaro-americano George Soros. Cuando Soros habla, aunque no nos guste lo que hace, hay que escucharle; por varias razones: su trabajo es la gestión de fondos, tiene 82 años, y por lo tanto mucha experiencia, y ha estado en medio del mercado mundial de capital desde su creación, que nos cuenta en su página web.

Al final de la Segunda Guerra Mundial, cuando entré en los mercados financieros, estos y los bancos estaban regulados estrictamente y los movimientos internacionales de capital financiero se encontraban prácticamente en punto muerto. Las restricciones se estaban relajando gradualmente, pero a un ritmo muy lento. A inicios de la década de 1970, el sistema bancario estadounidense todavía estaba congelado en la inmovilidad. La industria estaba muy fragmentada y reglamentada. Un negocio aburrido atraía a personas aburridas que estaban más preocupadas por la seguridad que por las ganancias. Las acciones de los bancos se negociaban con cita previa. Pero detecté algunos signos de vida. Walter Wriston en Citibank capacitó a un nuevo tipo de banqueros orientados al lucro que se desplegaron desde Citibank hacía otros bancos.

Luego vino la primera crisis del petróleo de 1973. Coincidió en ese momento histórico que los países productores de crudo disponían de una enorme cantidad de dinero que depositaron en los bancos. Estos formaron conglomerados empresariales y subsidiarias que se establecieron en Londres para escapar de las restricciones de la Ley Glass-Steagall. Ese fue el comienzo de los mercados de eurodólares y de préstamos en gran escala a las economías emergentes, se convirtieron en agresivos prestamistas a estos países y el boom de crédito comenzó.

Evolución del crédito en EEUU

Esos préstamos agresivos se convirtieron en una década pérdida para Latinoamérica y otros países emergentes. Dejando eso a un lado, lo más interesante del relato de Soros es que nos da una de las claves que diferencia profundamente nuestro mundo de la época anterior a la revolución capitalista iniciada en los 80 en los países anglosajones: la internacionalización del crédito, es decir, la libertad movimiento de capital.

miércoles, 3 de octubre de 2012

La deuda pública y la “sabiduría convencional”

La "sabiduría convencional" no siempre es acertada


Queridos lectores,

¿Por qué paga España su deuda pública tan cara? Una visión de esto, que podríamos denominar la de “la sabiduría convencional”, nos indica que se paga tan cara porque hay mucha deuda pública, su tasa de crecimiento es muy alta, indicando la incapacidad del gobierno de reducir su crecimiento, y por tanto el riesgo de impago es muy alto.

Para acompañar el argumento se utiliza la palabra “derroche”. Un derroche realizado en interés exclusivo de una clase política corrupta y arrimados varios al poder: “La Casta”.

En realidad este argumento es recurrente, a finales de los 90 durante la crisis del sudeste asiático se habló del “crony capitalism” o capitalismo clientelista para explicar la crisis, aunque objetivamente no había demasiados elementos de juicio para ello. Según la percepción de la corrupción de los empresarios y hombres de negocios, recogida en el índice que elabora Transparencia Internacional, en 1998 la situación de estos países era la siguiente:

Lugar en el ranking
País
Valor del índice
3
Suecia
9,5
6
Canadá
9,2
7
Singapur
9,1
11
Reino Unido
8,7
14
Irlanda
8,2
15
Alemania
7,9
16
Hong Kong
7,8
17
EEUU
7,5
23
España
6,1
25
Japón
5,8
29
Malasia
5,3
Taiwán
5,3

He incluido países representativos de la OCDE a modo de comparación. Los países en el centro de la crisis financiera global de 1997 resaltados en azul, los países en el epicentro de la crisis financiera global de 2007 en naranja.

En la antesala de la reciente crisis, año 2007, la situación se había modificado de la siguiente forma:

Lugar en el ranking
País
Valor del índice
4
Singapur
9,3
4
Suecia
9,3
9
Canadá
8,7
12
Reino Unido
8,4
14
Hong Kong
8,3
16
Alemania
7,8
17
Irlanda
7,5
17
Japón
7,5
20
EEUU
7,2
25
España
6,7
34
Taiwán
5,7
43
Malasia
5,1

No parece que puedan extraerse muchas conclusiones del “capitalismo clientelista” ni del índice de transparencia.

Sin embargo, la socorrida controversia sirvió para tapar lo sistémico: las deficiencias del mercado financiero global. Justificó la complacencia y la inacción, y la reacción de las economías emergentes a esa crisis provocó la situación actual.

La “sabiduría convencional”, como vemos, es muy peligrosa. Si este argumento convencional sobre la deuda pública fuese cierto no veríamos datos como estos

Para algunos este es el equivalente moderno de una tierra esférica en tiempos de Colón

Mientras hoy, 3 de octubre de 2012, el bono español a 10 años cotiza al 5,83% y el bono irlandés con el mismo periodo de vencimiento lo hace al 5,15%, algo menos de tres cuartos de punto porcentual por debajo. Sin embargo, a finales de 2011 Irlanda, un país dentro del euro, tenía un 40% más de deuda pública sobre PIB y mayor déficit público.